"Las pasiones de la vejez son más fuertes y terribles que las de la juventud"
Octavio Paz
En "Cuéntame cómo pasó" hubo un capítulo donde las dos abuelas dieron muestra del poder de la vejez. La madre de Antonio, Purificación (sí, así le pusieron) lleva meses sin tomar los medicamentos, y prácticamente en su lecho de muerte, es descubierta por Herminia, la madre de Mercedes. En un acto de mucho simbolismo, la enferma le hace prometer a la otra anciana, un poco más fuerte, que no dirá nada y la dejará morir tranquila, sin presionarla de que se tome sus medicamentos.
La vejez es tan poderosa que sólo la muerte la vence.
Mis padres se acercan a su vejez. Yo creo que les heredé su prisa por llegar a ella. No son tan viejos, 56 y 52 años tienen. Mis suegros, los papás de Edi, tienen 70 y 63. Técnicamente, solo mi suegro es "viejito" con todo derecho. Me preocupa mi madre, que lleva años sintiéndose vieja. No lo es, pero ha hecho sus mejores esfuerzos en parecerlo. No, es un poco injusto decir eso, pero parte de ella se aferra a alcanzar la vejez, como si fuera el único puerto seguro de todos los que la vida le ha negado. Sí, mi madre no ha conocido puerto seguro. Creo que es eso. Tengo que esforzarme en entenderla.