miércoles, marzo 16, 2005

Quítale la cáscara - Yo pecador (post en dos tiempos)

Un problema típico de los culturosos del DF es su desprecio por la cultura popular. Marilú, la profesora de Jimena, es de esas. Hoy tuvimos un serio altercado con ella porque ha deteriorado mucho la forma en la que Jime convive con sus amigos. En su afán por "equalizar" el ambiente emocional del salón de clases ha reprimido y segregado a Jime. Le dijimos que la "piedra de toque" emocional de Jimena es justamente su capacidad intelectual y que al negarle ese asidero le había trastornado todos sus sentidos y su forma de interactuar con su "pequeña sociedad". La mujer no es tonta, sólo necia, y entendió inmediatamente que teníamos razón y que su estrategia ha sido equivocada.

Parte de las conclusiones de la plática fue la explicación de porqué era importante no negarle a Jimena esa herramienta de socialización. Para explicarle a lo que me refería traté de recurrir a un ejemplo simple: Los Increíbles, la película. Le pregunté si la había visto y me miró con ojos de desdén y sonrisa de dandy: "No"...


Hasta ahí iba el post ayer. Ya no terminaré la idea, porque además, creo que como está queda más o menos clara. Pero 24 horas y una soberana madriza de chamba después, lo pertinente es pedirle disculpas a Jimena. Ahora sí siento que fallamos como padres. No que nunca hubieramos fallado, pero Edith y yo funcionamos como tándem, cuando falla uno, entra el otro de inmediato y hace que la falla no se note o casi no se note. Esta vez no fue así. Llevamos tres o cuatro meses navegando por instrumentos y tratando de enmendar nuestras vidas profesionales y descuidamos a nuestro tesoro. Fallamos y no tengo mas que excusas al respecto. Jimena fue feliz ayer con el cambio de actitud de su maestra y yo le compré el DVD recién salidito del horno de Los increíbles, la famosa película. Hoy, por primera vez en muchos meses, Jimena iba feliz de ir a la escuela. No creo en Dios pero no sé cómo expresar mi arrepentimiento. Hoy me duele haber fallado. Ya revisamos y ajustamos el cluster y creemos que podemos evitar que vuelva a pasar. Jimena merece nuestro máximo esfuerzo y se lo seguiremos dando. Perdón Jime por esta falla.