Jimena tiene, como parte de sus rituales diarios, la costumbre de hacer una pequeña oración antes de dormir. Edith y yo hemos procurado inculcarle que, en lugar de "pedirle a Dios", le agradezca lo que ella crea que recibió ese día. Es un ritual bonito puesto que le permite repasar los momentos buenos del día.
Antier, lunes 8 de noviembre, la oración del día de Jimena fue la siguiente:
Gracias Diosito por todo lo que nos diste hoy, fue un día muy bonito, me divertí mucho en la escuela y en el trabajo de mamá y me dio mucho gusto conocer a Chris... a Semidios, porque aunque se llama Christián mejor le digo como se le conoce. Gracias Diosito por este y por todos los días que nos das
Sé que ya han de decir que ya chole con mi carnal. Ya logovo ha de estar haciendo unos relatos slash durísimos con nosotros. Para mí ha sido un gusto poder conocer a un tipo tan chido y poderme llamar, ahora sí (desde antes, pero ahora más) su amigo. Gracias "maese".